Entramos en la sexta y última semana del campamento. ¡Qué emoción! Quedan poquitos días para terminar y se nota. Los niños están un poco más cariñosos de lo normal, saben que esto va a terminar y no quieren.
Mientras tanto, seguimos disfrutando con juegos musicales -aprendiendo los sonidos de los instrumentos y bailando-, nuestras ya sabidas manualidades -esta vez un zorro muy amistoso- y nuestros juegos de agua y cooperación en el patio.
Hoy, como novedad, la guerra de agua ha sido entre monitores y niños. Como consecuencia, hemos acabado todos bien mojados y muertos de risa.
